Estamos en un tiempo importante de crisis. La crisis como sabemos muy bien nosotros es una época de trancisión, un cambio que sucede tras el desmoronamiento de la estructura anterior y la creación de otra estructura nueva y totalmente diferente. Nadie apuesta por la nueva estructura porque es innovadora y diferente a lo que se acostumbra. Pero es inevitable. Es inevitable que también suceda en nuestro contexto que es el de la salud mental.
Desde nuestra experiencia cada vez estamos más convencidos de que las causas de nuestro sufrimiento están muy relacionados con los problemas del resto de seres humanos como son la soledad, el desamor, los problemas económicos, la discriminación, los problemas familiares, la mentalidad y los valores sociales del neoliberalismo, los efectos secundarios de la medicación, la enfermedad,...
Cuando las personas como nosotros cuentan sus historias, están explicando su vida, y el momento en que se encuentran en una narración de la que son protagonistas. Ya está fuera de lugar considerar a una persona como un enfermo mental aislado sin tener en cuenta su contexto. Que digan que aumenta la enfermedad con la crisis es incierto. Aumenta el sufrimiento humano y las expresiones del mismo y aumentan los suicidios. Ya están surgiendo voces en contra de la idea de que la población está enferma. Las personas responden a su sufrimiento por diferentes causas con explicaciones coherentes. Lo que pasa es que hemos sido capaces de anestesiar nuestro malestar con drogas. ¿Alguien cree que las drogas dan la felicidad? . Las drogas pueden contener y anestesiar el dolor pero no lo hacen desaparecer. Y es por esto que surgen nuevas teorías en psicología relacionadas con el punto de vista holístico del ser humano, que invaden los medios de comunicación como salvadoras de la humanidad, que hablan de la energia, del cambio espiritual y que se convierten en religión. El ser humano necesita tener unos valores y una ética que se ha perdido pero estas teorías surgen de manera exagerada para ofrecer alternativas al consumismo. Pero esta nueva teoría psicológica también se consume en forma de frases al aire que suenan vacías. Pero es el comienzo de un cambio, la necesidad de otra opción y el comienzo de un siglo. Desde la Sociedad Española de Neuropsiquiatría, la AEN se escribe un Manifiesto al que nos adherimos y que firma nuestra Federación , en el que se hace una declaración de intenciones de lo que se desea y por lo que se trabajará para cambiar la atención a las personas en salud mental. Ya no se quiere contener sino apoyar y comprender a las personas. En este enlace podreis tener acceso a la lectura del Manifiesto en torno a la coerción en los Servicios de Salud Mental
Desde nuestra experiencia cada vez estamos más convencidos de que las causas de nuestro sufrimiento están muy relacionados con los problemas del resto de seres humanos como son la soledad, el desamor, los problemas económicos, la discriminación, los problemas familiares, la mentalidad y los valores sociales del neoliberalismo, los efectos secundarios de la medicación, la enfermedad,...
Cuando las personas como nosotros cuentan sus historias, están explicando su vida, y el momento en que se encuentran en una narración de la que son protagonistas. Ya está fuera de lugar considerar a una persona como un enfermo mental aislado sin tener en cuenta su contexto. Que digan que aumenta la enfermedad con la crisis es incierto. Aumenta el sufrimiento humano y las expresiones del mismo y aumentan los suicidios. Ya están surgiendo voces en contra de la idea de que la población está enferma. Las personas responden a su sufrimiento por diferentes causas con explicaciones coherentes. Lo que pasa es que hemos sido capaces de anestesiar nuestro malestar con drogas. ¿Alguien cree que las drogas dan la felicidad? . Las drogas pueden contener y anestesiar el dolor pero no lo hacen desaparecer. Y es por esto que surgen nuevas teorías en psicología relacionadas con el punto de vista holístico del ser humano, que invaden los medios de comunicación como salvadoras de la humanidad, que hablan de la energia, del cambio espiritual y que se convierten en religión. El ser humano necesita tener unos valores y una ética que se ha perdido pero estas teorías surgen de manera exagerada para ofrecer alternativas al consumismo. Pero esta nueva teoría psicológica también se consume en forma de frases al aire que suenan vacías. Pero es el comienzo de un cambio, la necesidad de otra opción y el comienzo de un siglo. Desde la Sociedad Española de Neuropsiquiatría, la AEN se escribe un Manifiesto al que nos adherimos y que firma nuestra Federación , en el que se hace una declaración de intenciones de lo que se desea y por lo que se trabajará para cambiar la atención a las personas en salud mental. Ya no se quiere contener sino apoyar y comprender a las personas. En este enlace podreis tener acceso a la lectura del Manifiesto en torno a la coerción en los Servicios de Salud Mental
http://goo.gl/PwsiWL
Maniesto en torno a la coerción en los Servicios de Salud Mental
Maniesto en torno a la coerción en los Servicios de Salud Mental
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